La responsabilidad, por ejemplo, no es un deber sino un hecho inevitable: somos los hechores responsables de cualquier cosa que hagamos. Nuestra única alternativa es reconocer tal responsabilidad o negarla.” Claudio Naranjo
La libertad y la responsabilidad no pueden ir por separado. Tienes la libertad de pensar, sentir, hablar, actuar en cualquier momento pero con la responsabilidad de hacerte cargo de lo que expresaste, elegiste o decidiste sin culpar a los demás.
La libertad implica responsabilidad, es decir ser "libre" no supone faltar al respeto a los demás. Es asumir la responsabilidad de expresar lo que se siente y se piensa asertivamente sin humillar o descalificar al otro.
“La libertad de cada uno termina en donde empieza la del otro”.
La responsabilidad emocional es aceptar que tus emociones dependen de ti, de tu manera de percibir, interpretar la situación que estás experimentado y de lo que piensas de la actuación de los demás. Hacerte cargo de lo que sientes" "Hacerte cargo de tus emociones" y no depender de la opinión, palabras o acciones de los demás, es decir, hacerte responsable de tus emociones sin culpabilizar a nadie de tu sufrimiento, enojo, aburrimiento, frustración, vergüenza, etc.
“Hazte cargo”, quiere decir “hazte responsable de lo que piensas, de lo que sientes y de lo que haces, actúa desde tu libertad y date cuenta de ello”. Gestalt
Es necesario aceptar y entender que no puedes poner tu felicidad y sufrimiento en manos de otra persona.
”Te sientes como quieres sentirte”
Si algo te afecta o te enoja es necesario decirlo para que la otra persona conozca lo que sientes pero también depende de ti soltar y permitirte que no te afecte lo que hacen, piensan o sienten los demás, ya que esto no puedes controlar, lo que si puedes controlar es lo que haces con lo que sientes.
En el ámbito social y familiar se tiende a responsabilizar a otros o a una situación de como nos sentimos.
Tú eres el responsable de como me siento" (proyección personal)
Si en tu infancia atravesaste por un sinnúmero de carencias afectivas, de protección, seguridad o necesidades insatisfechas, depende de ti seguir responsabilizando a tus padres o a terceras personas de tus acciones o depende de ti seguir adelante, soltando todo lo que no te sirve y reestructurando tu vida para alcanzar tu bienestar y armonía emocional; es decir, estás a tiempo de asumir las consecuencias de tus malas acciones y decisiones para reinvidicarte y tomar otro camino más saludable.
Por el contrario, cuando estableces límites asertivos necesarios en el exterior y los demás lo toman como personal enojándose o entristeciendo, no puedes responsabilizarte de lo que sienten, pero si puedes darte cuenta que cada persona es libre de interpretar lo que dices y haces a su manera, como también tiene la libertad de entender y respetar tu posición aunque no sea de su agrado y conveniencia.
Ser responsable emocionalmente tiene algunos beneficios personales importantes como:
"Hacerte cargo" de lo que quieres sentir te ayuda a desvincularte del efecto negativo que pueden producir ciertas acciones de los demás.
Pensar que tus objetivos y el camino que quieres seguir depende de ti y no de tus experiencias negativas de tu infancia o de tu pasado.
Hazte responsable de tu lenguaje interno que te castiga, te agobia, te culpabiliza y te baja tu autoestima, tratando de cambiarlo por un lenguaje que te haga crecer y fortalecer tu seguridad y confianza.
Asumir la responsabilidad emocional, te ayuda a asumir tu infancia y aceptar las deficiencias de los padres, los errores, las dificultades para decir lo que realmente pensamos y queremos, etc. para establecer un cambio positivo en tu vida.
“Debes asumir la responsabilidad personal. No puedes cambiar las circunstancias, las estaciones o el viento pero puedes cambiarte a ti mismo.” Jim Rohn
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